En un hito histórico para la protección de la niñez migrante en Panamá, la Secretaría Nacional de Niñez, Adolescencia y Familia (SENNIAF) anunció que una niña migrante, quien ingresó al país sin identidad, sin padres ni familiares, ha sido reconocida oficialmente como panameña.
Tras un arduo proceso de investigación a nivel nacional e internacional, las autoridades no lograron encontrar datos que permitieran conocer su nombre, edad o procedencia, lo que imposibilitó su reunificación con algún familiar. Ante este panorama, SENNIAF inició un proceso para que se le otorgara la nacionalidad panameña, garantizándole así todos sus derechos fundamentales.
Este paso representa un avance significativo en la protección de la niñez migrante en el país, asegurando que ningún menor quede en el limbo sin identidad ni acceso a servicios esenciales. Con esta decisión, la menor ahora podrá disfrutar de derechos como la educación, salud y una identidad propia que le permitirá desarrollarse en un ambiente seguro y protegido.
Las autoridades han reafirmado su compromiso con la defensa de los derechos de la niñez y han destacado la importancia de seguir fortaleciendo las políticas de protección para garantizar que ningún niño o niña quede desamparado.
Esta acción refuerza la postura humanitaria de Panamá ante la crisis migratoria en la región.
